curioso es lo que acaba de ocurrir el día de ayer en mi barrio. lo que son las vueltas de la vida. por un lado, en la casa de la esquina se abrió una nueva heladería, en una casa en la que por mucho tiempo hubo un quiosco, pero que hace años que se cerró por motivos de salud (de los dueños) muy lindo ha quedado el local.
por el otro, luego de 35 años, mis vecinos de enfrente se mudan, E. y G., por su avanzada edad y sus problemas de salud que G. acarreaba. ahora están más cerca de sus hijos, ahora podrán estar más cerca de los nietos, que solo los fines de semana los visitaban. aquí en su soledad terminaron los días de vivir en su querida casa. el recuerdo de Pampa también quedó aquí, inmortalizado en la que siempre será la casa de E. y G.
en un solo día como puede cambiar todo. una heladería rejuvenece el barrio, y por el otro los vecinos más antigüos se mudan para (tratar de) estar mejor. la vida pasa.
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